jueves, 23 de diciembre de 2010

Un río de sangre maldita

 

 

La destrucción
se apodera de mi cuerpo.

Quiero que lo entiendas...

¿Pero cómo explicarte?
Si llevas el peso de la humanidad
sólo sobre tus ojos.

Si en tu vientre
un sol de carne
engendra la locura.


¿Cómo amarte?


Si mi angustia
es ahora
un río de sangre maldita.


¿Y a quién dar cuenta de esta catástrofe?
Si Dios está muriendo
prisionero en el sótano de una iglesia.








Aquí mi último libro

2 comentarios:

  1. Qué bellos poema!
    Me encantó visitar tu blog...
    volveré...
    Besos, amiog
    Maria Lua

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  2. guaaa!! me encanta el blog, siempre encuentro poemas preciosos

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