* Los sucesos y personajes que aparecen aquí son completamente ficticios. Cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, o con hechos reales es pura coincidencia.
La eterna se fue de mí,
subió a la nave de Rolando Rivas,
parece que el quía pasaba música cool.
Ellos están todo el tiempo
hablando de inseguridad,
y prolongan ese chamuyo
hasta el infinito.
Él tiene una muy buena voz,
como la voz de la eterna,
así que no hay lugar para mí
en esta escena.
La nave del pobre tachero
y la eterna que siempre lo acompaña,
van,
como víctimas de sus propias inseguridades,
surcando las noches de buenos aires,
al ritmo de esa musiquita cool,
novedosa y urbana.
Imagen con licencia de dominio público
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